La Reserva de Biosfera “Mariñas Coruñesas e Terras do Mandeo” se localiza en el ámbito del litoral cántabro - atlántico de Galicia, en el Noroeste de la Península Ibérica. Éstá conformada por 116.724 hectareas. Este territorio se compone principalmente de dos grandes cuencas hidrográficas, y en ella, podemos encontrar desde paisajes de huerta hasta paisajes de montaña que han sabido conservar sus valores culturales y etnográficos en armonía con la conservación del medio natural.
Las dos cuencas principales son las del Mandeo (482 Km2) y Mero (376 Km2), que presentan un relieve suave y están prácticamente integradas en los límites del territorio de la Reserva, suponiendo algo más del 75% de superficie de la misma.
Una de las singularidades de mayor interés dentro del Litoral Cántabro-Atlántico, y en esta Reserva de la Biosfera, es la presencia de las Rías. Éstas son profundos entrantes en la costa, generados por las inundaciones de relieves en un valle fluvial y que albergan una gran biodiversidad
Comprende una superficie de 113.969,7 hectáreas terrestres y 2.754,8 hectáreas marinas, lo que hace una superficie total de 116.724,5 hectáreas que conforman la Reserva . Existe una gran riqueza natural y biodiversidad que han convivido en armonía con las prácticas tradicionales y culturales del territorio.
Riqueza floral y faunística de la Reserva
La variedad de paisajes alberga una gran riqueza de especies, en muchos casos especialmente amenazadas y endemismos de gran singularidad. Los cursos de los ríos Mandeo y Mero mantienen corredores fluviales y complejos húmedo turbosos de elevado grado de naturalidad.
Es aquí, donde podemos encontrar helechos paleotropicales, considerados auténticos fósiles vivientes, llanuras encharcadas, estanques y lagunas temporales o permanentes. En este tipo de hábitats también se pueden observar entre las alisedas riparias y los robledales termófilos de Quercus robur y Quercus pyrenaica.
Estos bosques que mantienen una estructura y funcionalidad próxima a la naturalidad, con especies caducifolias persisten acantonados en valles y son conocidos popularmente en Galicia como fragas.
Los elementos más antiguos encontrados en la Reserva de Biosfera “Mariñas Coruñesas e Terras do Mandeo” provienen de culturas megalíticas y castreñas, y están representados por túmulos, dólmenes, petroglifos, arte rupestre y castros.